lunes, julio 13

el papel...

rayas en un papel
rayas y más rayas

decides,
rayas...
descartas decidir,
mas rayas...

y si no controlas el trazo,
si tu acción o tu no acción;
no tienen un fin,
el cuadro se torna sucio,
indescriptible...
nudos...

y si intentas, aventurero de ti,
recorrer el trazo a la inversa
como en esas pelis antiguas,
peligras de activar el bucle
de la parodia de un tropiezo
una y otra vez...

pero miremos el lado bueno,
entre cientos de rayas mediocres,
a veces... un nuevo trazo,
un trazo que no habías previsto,
un trazo impulsivo,
plasma ya no una raya...
sino una asombrosa curva,
un sentido...
una expresión gráfica de lo bello,
y te absorve...
y te emociona...

y los nudos te parecen bellos,
porque preceden a ese poco frecuente trazo,
a esa expresión de lo sencillo,
y porque gran parte de la culpa
de ese gesto involuntario,
de ese espásmo de muñeca,
de ese instante en el que has echo un trazo perfecto
la tienen los dichosos nudos...

y eso no esta nada mal